Antes quémate que mantenerte frío en la noche sal afuera , rompe las cadenas y mantente libre. Como leña puesta en la hoguera que pronto se prende se tu estrella , fija hoy tu meta y siempre ríe . Hemos nacido siendo únicos y vulnerables el tiempo es culpable de vestirnos con corazas. Y en efímeros recuerdos hay un niño en la plaza dando patadas en fútbol chutando a ver si marca. Recuerdos , alimento para verso escrito nunca fuimos quien quisimos solo sombras de un ídolo hasta que pronto rompimos con la sombra para abismo caminando preguntándome quien soy , sin destino . Dios murió antes de conocer a Nietzsche viendo algún cristiano de esencia pura impropia . Caminé por málaga , por Asturias y por Soria disfruté con dinosaurios, vampiros y otra cosas. Crecí con "Mortadelo", " Zipi y Zape" y" Anacleto" " Superlópez" , "trece rue" y un cegato " Rompetechos". Cuando abuelas murieron escapé en pelis de miedo o dibujando gore por irrealizar el hecho. Comencé en los versos por una niña flaca que nunca miró mi cara ni supo lo que escribía. Luego obsesión con otra, dibujándola en mi cuarto aunque se pasó pronto y rompí todo retrato. Bailé con varias pero me sentí vacío la fiesta de la disco no saciaba nunca alma. Y tras sentirme frío en mi desvarío propio hice daño a quien vino y no veré jamás. Pero peor es enterrar a la familia que visité semana antes en propia casa Quizás exagero todo y me gusta la nostalgia quizás en un vaso de agua me ahogo por nada Mirando otros ojos buscando el reflejo mismo sin saber que era amor mentí confuso en el deseo que brinda el falso sueño mirando el cuerpo bello pero bueno , a la segunda la vencida sin veneno. Encontré un calor que evaporó mis aguas llenó toda falta y alumbra mis días con una sonrisa que quita melancolía mi lilipopo dulce , mi niña bonita. Ojos caramelo, piel de terciopelo si tú más guapa que ninguna me da el elixir de sonreír siempre en este devenir eres la hoguera que me da llama y fin. Ojos caramelo, piel de terciopelo si tú más guapa que ninguna me da el elixir de sonreír siempre en este devenir eres hoguera que me da llama y fin. eres hoguera que me da llama y fin. Te quiero eres la luz que me da la calma tranquilizó mi alma con mirada de empatía Al contacto de tus labios marcha sola la ventisca. Mujer de piel de fuego y mirada tan niña. Te amo quitas la cruz que porta mi falta de humanidad que estaba sola a la deriva la regresaste con un beso de fuego de cálido amor que brilla y concede mi luz del día. Dulce y tierna niña. Dulce y tierna niña. Ojos caramelo, piel de terciopelo si tú más guapa que ninguna me da el elixir de sonreír siempre en este devenir eres hoguera que me da llama y fin.